miércoles, 26 de noviembre de 2008

El verbo

  • El verbo parte de la oración, que expresa existencia, acción, condición o estado que realiza el sujeto. El verbo es el núcleo de la oración que puede formar el sujeto y el predicado

Verbos regulares e irregulares
Los verbos irregulares son aquellos que poseen conjugaciones particulares para los llamados "tiempos verbales primitivos" o simplemente "tiempos primitivos" que son el presente del modo indicativo ("Yo quepo"), el pretérito perfecto simple del indicativo ("Yo cupe") y el futuro simple del mismo modo ("Yo cabré").
Como en el ejemplo recién dado, es posible determinar si un verbo es o no irregular conjugándolo en esos tres tiempos y viendo si se atiene a las reglas de conjugación a las que se adaptan los demás verbos.
La irregularidad de un verbo simple cualquiera se mantiene en la conjugación de los verbos que de él se deriven:
Hacer: deshacer, satisfacer, rehacer, etc.
Poner: componer, descomponer, yuxtaponer, etc.
Este principio, sin embargo, posee algunas excepciones. La más común es la que se aprecia en los derivados del verbo "decir" ("maldecir" y "bendecir"), que en el futuro del modo indicativo no se conjugan como "maldiré" y "bendiré" (que es lo que se supondría según la regla) sino "maldeciré" y "bendeciré".
Los verbos regulares son, por el contrario, aquellos que se atienen estrechamente a los paradigmas o modelos de
conjugación más usados en la lengua. En español hay tres de esos paradigmas: la primera conjugación, cuyos infinitivos terminan en -ar; la segunda, en la que terminan en -er y la tercera, en la que terminan en -ir. Dentro de la conjugación regular puede considerarse también una conjugación extendida por medio de perífrasis verbales que señalan distintos tipos de aspecto y modo verbal.

No hay comentarios: